En algún momento de nuestro emprendimiento nos planteamos la posibilidad de contratar a un empleado, pero existe una duda con carácter general sobre los costes reales que te implicaría finalmente contratar a alguien. Un aspecto completamente normal, ya que tienes que saber si finalmente pudieras permitirte la contratación y si te saldría rentable. La pregunta en el aire siempre es ¿cuánto cuesta tener un empleado?
Es por esto, que hoy te traemos este artículo para explicarte los aspectos más fundamentales a tener en cuenta para saber cuánto cuesta tener un empleado.
En primer lugar, todo trabajador va a contar con dos costes generales que conocemos todos: salario bruto y las cotizaciones a la seguridad social a cargo de la empresa. ¿Y cuánto es esto? Ahora te lo analizamos en profundidad, pero antes, debemos explicarte unas nociones básicas que debes entender:
Nociones básicas sobre cuánto cuesta tener un empleado
Salario bruto y cotizaciones de la seguridad social
¿Qué es el salario bruto? ¿Qué engloba? Aquí tienes tres aspectos fundamentales:
Como todos sabemos, el salario bruto se trata de la cantidad de dinero acordada entre el empleado y la empresa como remuneración por su trabajo. Este salario no incluye las deducciones fiscales o las cotizaciones a la seguridad social. Determina el salario bruto anual del trabajador sumando su salario base, las pagas extra y otras remuneraciones adicionales, como las horas extras.
Obviamente, como toda persona física, el trabajador está sujeto al IRPF. En este sentido, las empresas suelen retener este impuesto de los salarios de sus empleados y hacer los pagos correspondientes a las autoridades fiscales.
Y las cotizaciones a la seguridad social son aquellas contribuciones que tanto el empleado como la empresa realizan a los sistemas de seguridad social mes a mes y de manera obligatoria.
Estas cotizaciones suelen incluir la atención médica, el seguro de desempleo, las pensiones y otras prestaciones sociales, y que se calculan en base a unos porcentajes que se aplican al sueldo bruto y que varían cada año. Estos son:
1.- Cotización por contingencias
Es la cotización de contingencias comunes se realiza para cubrir las enfermedades o bajas laborales pero que no son directamente causadas por el desempeño de su trabajo.
El tipo de cotización es del 23,60% para la empresa y del 4,70% por parte del trabajador, para hacer un total de 28,30%.
Además, también están las contingencias profesionales para accidentes del trabajo, cuyo tipo de cotización depende de la profesión de la que se trate, oscilando entre el 1,5% y el 7,5%.
2.- Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI)
Se trata de una cotización extra que entró en funcionamiento en 2023 y que se realiza para cubrir las enfermedades o bajas laborales pero que no son directamente causadas por el desempeño de su trabajo.
El tipo de cotización es del 23,60% para la empresa y del 4,70% por parte del trabajador, para hacer un total de 28,30%.
Además, también están las contingencias profesionales para accidentes del trabajo, cuyo tipo de cotización depende de la profesión de la que se trate, oscilando entre el 1,5% y el 7,5%.
3.- Cotización por desempleo
La cotización a la Seguridad por el desempleo es distinto en función del tipo de contrato que tenga el trabajador, pudiendo estar ante uno de estos dos casos:
• Desempleo para contrato indefinido, cuyo tipo de cotización es el 5,5% por parte de la empresa y el 1,55% de los trabajadores, para hacer un total de 7,05%.
• Desempleo para contrato de duración determinada a tiempo completo o parcial, donde la empresa asume el 6,70% y el trabajador el 1,60% de los trabajadores, de un total de 8,30%.
4.- FOGASA
Es la aportación de la empresa al Fondo de Garantía Salarial, que es un fondo común de la Seguridad Social que se encarga de pagar a los trabajadores cuyas empresas son insolventes y no pueden asumir la liquidación.
El tipo de cotización es el 0,20% del salario bruto a cargo de la empresa.
5.- Formación Profesional
Existe un tipo de cotización para contribuir a la formación profesional del 0,60% a cargo de la empresa y del 0,10% por parte de los trabajadores, para hacer un total 0,70%.
Cálculo del coste del trabajador
Una vez visto todas las cargas sociales que tiene la empresa y porcentajes que se aplican a cada uno de ellos, veamos con un ejemplo cómo se hace el cálculo del coste laboral para la empresa.
Trabajador a jornada completa con contrato indefinido, que cobra el salario mínimo interprofesional (SMI).
Salario bruto 1.260 € (con las pagas extras incluidas) por el tipo de cotización total de 36,85% igual a 464,31 € aproximadamente porque faltaría el tipo por contingencias profesionales que va en función de la actividad (ingeniero, abogado, albañil etc)
Costes:
Sueldo Bruto | Sueldo Neto | IRPF | Pago a la Seguridad Social | Coste total para la empresa |
1.260 € | 1.178,73 € | 0,00 € | 464,31 € | 1.724,31 € |
¿Por qué deberías calcular y tener actualizados los seguros sociales?
Es necesario hacer un cálculo de los Seguros Sociales porque la ley obliga a pagarlos mes a mes, pero además es útil para:
• Elaborar el plan de negocio de una empresa: conocer el coste mensual de la seguridad social por sus empleados
• Estudiar nuevas contrataciones o ascensos en la empresa: te orienta sobre el coste de personal al que hacer frente.
Cuánto cuesta tener un empleado: trucos para disminuir costes
Un truco para disminuir los costes salariales es conocer que incentivos existen para la contratación de los trabajadores, pero más importante es saber que requisitos solicita la administración para acceder a estas ayudas. Así, podremos realizar la selección y posterior contratación de personal de manera más eficaz.
Esto es lo que debes tener en cuenta si quieres acceder a estas ayudas:
1.- La empresa debe estar al corriente en sus obligaciones fiscales y laborales.
2.- El trabajador siempre debe estar inscrito como demandante de empleo (con el DARDE en vigor).
3.- No debe haber tenido relación laboral anteriormente.
4.- Desempleado de larga duración (más de 12 meses en el paro).
5.- Mujeres.
6.- Mayores de 45 años.
7.- Menores de 30 años.
8.- Personas con discapacidad.
9.- Personas mayores de 55 años con incapacidad permanente que pudieran volver a ser contratados.
10.- Personas en riesgo de exclusión social como víctimas de violencia de género o personal LGTBI.
11.- Jóvenes con baja cualificación o que no tengan más de 3 meses de experiencia laboral.
12.- Personas que estén en posesión de un título universitario o de un título de grado medio o superior, especialista, máster profesional o certificado del sistema de formación profesional y no hayan pasado más de 3 año desde la obtención del título.
Otra manera de disminuir el pago a la Seguridad Social es invirtiendo en formación bonificada para los trabajadores. Las empresas, disponen, según el número de empleados de un crédito anual de formación que, por ejemplo, hasta 5 trabajadores sería de 420 €. Si invertimos esta cantidad en cursos para los empleados podremos descontarlo luego de los seguros sociales, es decir, se destinaría ese dinero a pagar la factura de la academia y bajaría la cantidad a abonar a la seguridad social. El coste para la empresa sería el mismo, pero conseguiríamos que el personal mejore sus competencias.
Si estás pensando en contratar personal pero aún no tienes claro cuánto cuesta tener un empleado, puedes contactar con los profesionales de Lamar Asesoría para ayudarte con la planificación del coste del trabajador y asesorarte sobre el contrato más conveniente a cada caso concreto y posibles bonificaciones.